lunes, 9 de noviembre de 2009

Emociones

Las Competencias Comunicativas

Las competencias es la preparación de personas con actitudes, conocimientos y capacidades intelectuales para lidiar con un cambio aceleradamente rápido, así como poseer habilidades prácticas, que permitan adaptarse con facilidad a situaciones y circunstancias cambiantes y complejas y con alto grado de incertidumbre, es lo que se entiende por competencia y no una pugna entres seres. Esta es integral, puesto que también involucra actitudes, valores y motivaciones relacionadas con la lengua, con sus características y sus usos, y con los demás sistemas de comunicación en general. Naturalmente, la adquisición de tal capacidad debe estar ligada a una experiencia social, a unas necesidades, a unas motivaciones y a una acción.
Es así que las competencias es la capacidad para responder exitosamente una demanda compleja o llevar a cabo una actividad o tarea, según criterios de desempeño definidos por la empresa o sector productivo. Las competencias abarcan los conocimientos (Saber), actitudes (Saber Ser) y habilidades (Saber Hacer) de un individuo.
La competencia comunicativa comprende las aptitudes y los conocimientos que un individuo debe tener para poder utilizar sistemas lingüísticos y translingüísticos que están a su disposición para comunicarse como miembro de una comunidad sociocultural dada. Las competencias comunicativas deben plantearse desde los seis aspectos fundamentales de la comunicación oral: Lingüística, Paralingüística, Pragmática, Textual, Quinésica, Proxémica y Cronético.
Por competencia lingüística se entiende el hecho de "saber una lengua". Este conocimiento consta de varios componentes: fonológico, sintáctico, semántico, léxico y morfológico. La competencia lingüística compete a la lengua, considerando a esta como un saber del lenguaje no es sólo lo dicho, sino lo pensado, y, sobre todo, lo por decir. Saber habla de un querer decir.
Se caracteriza por la capacidad de un hablante para producir e interpretar signos verbales. El conocimiento y el empleo adecuado del código lingüístico le permiten a un individuo crear, reproducir e interpretar un número infinito de oraciones.
El conocimiento y el empleo se vinculan con dos modalidades diferentes de la lengua: la lengua como sistema de signos y la lengua en funcionamiento, en uso.

La lengua como sistema de signos corresponde al dominio semiótico, y su función esencial es significar.
La lengua en funcionamiento, en uso, corresponde al dominio semántico, y su función básica es comunicar.
Por su parte la competencia Paralingüística es la capacidad de un hablante para utilizar de manera adecuada determinados signos no lingüísticos que le permiten expresar una actitud en relación con su interlocutor y con lo que dice: ya sea para declarar, interrogar, intimidar, rogar, ordenar, etc.
En las comunicaciones orales, esta competencia se manifiesta en el empleo de los signos entonacionales: tono de la voz, cadencia o ritmo y énfasis en la pronunciación.
En las comunicaciones escritas, se manifiesta por medio del empleo de los signos de puntuación, de las sangrías, de los nomencladores, de la distribución general del espacio, tipos de letras, etc. Estos recursos nos permiten identificar la división de un texto escrito en capítulos, párrafos, temas y subtemas.
La competencia pragmática el punto de partida de esta competencia es la consideración de el hablar como un hacer. Todos los usuarios de una lengua tienen una capacidad que les permite asociar los enunciados con los contextos en que dichos enunciados son apropiados y poder persuadir a los demás.
Recordemos que la pragmática es la disciplina que se ocupa de estudiar el uso que los hablantes hacen del lenguaje en un contexto lingüístico o extralingüístico. De esta manera, podemos afirmar que la pragmática parte del supuesto de que la comunicación es la función primaria del lenguaje.
Por eso, teniendo presente lo anterior, vamos a definir la competencia pragmática como la habilidad para hacer un uso estratégico del lenguaje en un medio social determinado, según la intención y la situación comunicativa; es saber ejecutar acciones sociales mediante el empleo adecuado de signos lingüísticos, o de signos de otros códigos no lingüísticos, utilizados de acuerdo con unas intenciones y con unos fines deseados.
Según pretenda con su acto comunicativo informar, ordenar, interrogar, impugnar, sugerir, rogar, etc., el sujeto hablante necesita plantearse con precisión varias preguntas, si aspira a alcanzar con éxito sus propósitos:
• Cuál es el motivo, la finalidad y el contenido de su acción comunicativa.
• A quién va dirigida.
• Cuándo es el momento adecuado para emprenderla.
• Dónde debe efectuarla.
La competencia textual es la capacidad para articular e interpretar signos organizados en un todo coherente llamado texto. La competencia textual implica las competencias consideradas anteriormente y, además, las competencias cognitiva, comunicativa y técnicas.
La competencia quinésica se manifiesta en la capacidad consciente o inconsciente para comunicar información mediante signos gestuales, como señas, mímica, expresiones faciales, variados movimientos corporales, etc. Estos signos pueden ser expresiones propias o aprendidas, originales o convencionales.
La competencia proxémica esta competencia consiste en la capacidad que tenemos los hablantes para manejar el espacio y las distancias interpersonales en los actos comunicativos. Las distancias entre los interlocutores, la posibilidad de tocarse, el estar separados o en contacto, tienen significados que varían de una cultura a otra. Los códigos proxémicos se establecen, entonces, según la cultura, las relaciones sociales, los roles, el sexo, la edad.
La competencia proxémica es esa habilidad que tenemos para crear, transformar y apropiarnos de espacios, tanto en la vida pública como privada. Ella nos permite asignarle significado al respeto o a la transgresión de esas distancias interpersonales y de los espacios codificados por los distintos grupos sociales.
Competencia Cronética es la capacidad de los seres humanos de movese en dos coordenadas: tiempo y espacio. La segunda la abordamos en la proxémica. La primera, el tiempo, es del dominio de la cronética, entendida como el manejo de la comunicación en el tiempo, la producción de significados con y desde la coordenada tiempo.

jueves, 5 de noviembre de 2009

EMTP FOTOS

Reflexion

Radio Corazon



La lengua es inmaterial y es social

La lengua es inmaterial pues esta se aloja en la menoría de los seres vivos y permite adquirir experiencia sobre sucesos y hecho que a la luz de esta; y social por que esta la disposición de los seres, agrupados en comunidad que en el trascurso del tiempo a desarrollado un lenguaje común para interactuar y compartir dicha experiencia o hecho que la memoria guardado, no tan solo de generación a generaciones, sino dentro de los pares de dicha comunidad.
Por esto cada vez que lo seres vivos que pueden usan la lengua como una interacción para desarrollar cohesión y por que no decir ayuda a su comunidad.

El lenguaje es una actividad humana que nace con el hombre y la mujer, que solo les pertenece a ellos como genero y que les permite comunicarse y rela

Cuando Aristóteles plantea en su modelo clásico de comunicación que esta compuesto por un emisor, mensaje y receptor, el lo plasma para todos lo seres vivos, pero visualizando a los seres humanos, esto es reafirmado en nuestro tiempo (siglo XXI), donde la comunicación es la ciencia que estudia la interacción simbólica entre seres humanos.

El lenguaje va más allá, aquí lo seres vivos lo usan para interactuar entre ellos y podemos apreciar ejemplos en todo en el mundo animal, como el caso de la ballenas que lo usan para compartir experiencias entre ellas, entonce podemos ver que el lenguaje es un efecto de la comunicación y que esta se pude dar en distintos niveles (intrapersonal interpersonal, grupal organizacional y social). Pero esto podría estar cambiando y es así que la Dra. Pepperber con su experimento Alex un Loros africano, puede responder a preguntas en ingles sobre colores y números hasta el 6. Con esto podemos ver que el lenguaje no solo involucraría al hombre y a la mujer en su afán de relacionarse.